Honduras vive momentos de suma preocupación y zozobra debido a la propagación a nivel mundial del coronavirus (también conocido como COVID-19), y su arribo al país, por lo que el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA) hace un enérgico llamado a la ciudadanía a tomar y redoblar las medidas de prevención necesarias para evitar el contagio y su transmisión, entendiendo que es preponderante resguardarse en casa.
Asimismo, debe ser obligatorio activar mecanismos de vigilancia social para evitar que este virus sea la coyuntura perfecta para que nuestro país se vea nuevamente golpeado por una segunda pandemia: la corrupción. En virtud de lo anterior, nos expresamos en los siguientes términos:
- Que Honduras cuenta con uno de los sistemas de salud pública con mayor precariedad en la región, así como elevados índices en actos de corrupción en ese sector, prueba de ello son las 35 líneas de investigación que presentó el CNA desde 2014 a la fecha y los más de L 2,100 millones identificados como perjuicio económico al Estado, fondos que pudieron servir para la adquisición de al menos 100,000 respiradores artificiales para enfrentar la pandemia del coronavirus.
- Que vemos con seria preocupación cómo en el último mes, se aprobaron con el argumento de emergencia más de L 16,000 millones para poder enfrentar la pandemia, situación que demuestra la poca planificación desde el Estado al momento de aprobar el Presupuesto General de la República y su poca inversión sanitaria. Como ciudadanos, debemos mantenernos en alerta máxima para vigilar el manejo de esos recursos.
- Que esta instancia de sociedad civil, a pesar del decreto de Estado de excepción aprobado por el gobierno, continúa realizando sus labores en prevención y combate a la corrupción, por lo que se han iniciado tareas de investigación sobre el proceso de adquisición en el extranjero de los ventiladores mecánicos, a fin de garantizar que los mismos sean de verdadera utilidad para los pacientes que han sido infectados con coronavirus y no así para otras enfermedades.
- A las y los médicos, enfermeras y enfermeros, farmacéuticos y farmacéuticas y todo el personal que lucha a diario contra las inclemencias del tan vulnerado sistema de salud, extendemos con el mayor de los respetos, nuestro reconocimiento por permanecer en la primera línea de batalla para atender a la desprotegida y olvidada ciudadanía, quienes diariamente son víctima de una pandemia
- Hacemos un llamado a toda la ciudadanía a mantener la calma, sobre todo en momentos en donde la desinformación se apodera de las redes sociales, la desesperanza aumenta y se crea un pánico colectivo. Por eso mismo, es necesario verificar las fuentes de información y compartir únicamente las que sean verídicas y sustanciales.
- Consideramos que el llamado de las autoridades a que la población se vuelque a las calles en medio de una crisis social y humanitaria misma que está atravesada por la incertidumbre: ¡es un grave error! que pone en precario la salud física y emocional de los habitantes, por lo que sugerimos se creen estrategias para evitar al máximo las aglomeraciones y se pongan en marcha mecanismos como el Banasupro móvil para evitar que la población se exponga ante cualquier situación.
- Finalmente, extendemos esta demanda a la empresa privada, el sector financiero y proveedores de servicio a flexibilizar sus mecanismos de cobro y pago con el fin de beneficiar directamente a la población hondureña ya que atravesamos la peor crisis a nivel sanitario de la historia. Se necesita de una sociedad sana para estimular el desarrollo de nuestra Honduras: la solidaridad debe anteponerse ante cualquier interés económico y persona
Tegucigalpa, D.C., jueves 19 de marzo de 2020
